Mas sin embargo, sin contar nada
siempre estuve hay, nunca pedí nada
nada mas que tu felicidad,
quise ser aquel hombre,
aquel que anhelaras ver y abrasar.
Di todo por ti, busque tus sonrisa
en esos días grises,
fui tu caballero en la noche de penumbras,
limpie tus lagrimas una y mil veces,
todo por tu felicidad...
Fui el hombre que toda mujer desea,
el caballero que deseabas en tu vida,
el amigo sincero que escuchaba y comprendía,
fui todo lo que querías,
fui todo menos con quien querías estar...
Hoy ese hombre a muerto,
tanto la misma frase,
tanto las mismas derrotas,
siempre los mismos tropiezos,
hoy han doblegado su alma,
hoy fue y tal vez no volverá
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